¡Eres una persona de gran valor! De hecho, Dios te ha coronado con Su gloria y honor. Apocalipsis 3:11 nos dice que nos mantengamos firmes en lo que tenemos y no permitamos que alguien tome nuestra corona.
Nuestra corona representa nuestro destino, autoridad en Cristo y las bendiciones y el favor de Dios en tu vida. No permitas que las palabras o acciones de otra personas te tumbe la corona. Dios te la colocó y Él aprueba de ti.
Permite que este mensaje edifique en ti la fe y confianza que vienen de Dios. Sabrás quién eres en Dios y que ¡puedes hacer todo lo que Él te ha llamado para hacer!
Share: